Protección animal

Un juzgado ha decidido enviar a prisión, sin posibilidad de fianza, a una mujer que estaba siendo investigada por varios delitos graves: maltrato animal, estafa y falsedad documental. Esta persona ya había sido detenida a principios de año y, como medida cautelar, se le prohibió cualquier actividad relacionada con animales, pero no hizo caso y siguió con su actividad ilegal, lo que llevó a su nueva detención en junio.

Según el juez, la mujer no solo ignoró las órdenes judiciales, sino que además continuó vendiendo animales de compañía de forma ilegal, haciéndose pasar por diferentes asociaciones y protectoras en redes sociales, incluso cambiando de nombre para intentar no ser descubierta. Muchas personas, creyendo que ayudaban a los animales, le dieron dinero para supuestos gastos veterinarios y hasta viajaron largas distancias para recoger a los animales, pero en realidad estaban siendo engañadas.

El auto judicial destaca que, aunque la investigada se presentaba como defensora de los animales, en realidad solo buscaba lucrarse, ya que los animales estaban en condiciones muy malas, sin higiene ni cuidados, y algunos incluso murieron poco después de ser entregados. El juez considera que la única forma de frenar esta conducta es con una medida más dura, como el ingreso en prisión, ya que la investigada ha demostrado que no respeta las normas ni las decisiones judiciales.